___«El poder más estupendo que Dios podía otorgar, lo dio al espíritu. Y puesto que  todos los pensamientos están impregnados del poder del espíritu que los creó, evidentemente actúan. Sabiendo esto, cada uno de ustedes puede convertirse en un benefactor de la humanidad: a través del espacio, hasta las regiones más lejanas, puede enviar pensamientos como si fueran mensajeros, como si fueran criaturas luminosas a las que encarga de ayudar a los seres, consolarlos, iluminarlos,  curarlos. Aquel que hace conscientemente este trabajo penetra poco a poco en los arcanos de la creación divina».

Omraam Mikhaël Aïvanhov

224 páginas.